Es hermoso vivir y disfrutar
cada momento nuevo con pasión,
contemplar la belleza del instante
y gozar de la vida plenamente,
pero hay veces en que la vida viene
teñida de rigor y de tristeza
y en que no nos sentimos ya con fuerza
y nos faltan las ganas de exprimir
lo bello del momento… En esos casos
nos queda la ilusión de nuestros sueños,
la luz de la esperanza, los proyectos,
o si esto también falla, porque estamos
desencantados y sin ilusiones,
no creo que sea malo refugiarse
en lo que ya vivimos hace tiempo,
recrear ilusiones ya pasadas,
vivir de nuevo la alegría aquella
que sentimos hace ya mucho tiempo
y huir de la apatía y la tristeza
viviendo nuevamente los recuerdos.
V. K.